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Luego de varios años de haber lanzado el éxito de El Eternatua finalmente en 1975 llega la esperada segunda parte de El Eternauta. Esto sucedió gracias al éxito que tuvo el relanzamiento de la parte uno que hizo la editorial Record durante ese año. Este éxito inesperado llevo a la editorial a proponerle a Osterheld escribir una nueva versión. Sin embargo, las circunstancias tanto para Oesterheld como para el país habían cambiado considerablemente desde entonces, las cuestiones políticas actuales del país (por la dictadura militar) había llevado al guinista a unirse a grupos activistas y a volvar un enfoque político de sus historias. Cabe recordar que Oesterheld fue desaparecido en 1977.
Si bien el dibujante Solano Lopez, aparentemente, no estaba en total acuerdo de la radicalización que estaba sufriendo el personaje principal aún así se encargó de illustrar y entintar nuevamente las aventuras de El Eternauta.
La trama de El Eternauta II
La narrativa se retoma desde el punto donde culminó la primera parte, con el guionista de historietas frente a la casa de Juan Salvo, quien, tras haber olvidado todo lo acontecido, se encuentra disfrutando de un momento de ocio con sus amigos, Favalli, Lucas y Polsky, jugando al truco.
El guionista, aún desconcertado por lo ocurrido, regresa a su hogar, plagado de dudas y sin poder asimilar completamente lo vivido. Al entrar a su casa, se debate entre la idea de que todo fue producto de una alucinación o simplemente un intenso dolor de cabeza. Lleno de dudas y en casi en pánico por no saber ya que es real y que no, decide ir hacia la casa de Juan Salvo para contarle todo lo sucedido.
Al llegar a la casa se encuentra allí a Juan, su esposa Elena, su hija Martita, y sus amigos Favalli, Lucas y Polsky. Obviamente, todos quedan asombrados por la historia increíble que Oesterheld les cuenta. En un momento, él mismo parece olvidarlo todo tras experimentar un desmayo, pero sus anfitriones lo reconfortan invitándolo a quedarse y unirse a jugar una partida de truco.
Durante la partida Oesterheld se incorpora repentinamente, recordando todo de nuevo y mencionando la nevada. Juan le responde que él también recuerda todo, pero que en realidad no se trata de una nevada, sino de algo mucho más sombrío. Entonces se dan cuenta de que la casa se encuentra en medio de un páramo y que el resto de la ciudad ha desaparecido, al igual que Favalli, Lucas y Polsky.
De alguna manera, la casa ha sido transportada un siglo y medio al futuro, y sus ocupantes deben buscar la manera de sobrevivir en un mundo aún dominado por Los Ellos, donde solo unos pocos humanos logran subsistir, con Juan asumiendo el papel de líder.
Sin embargo, durante este proceso, Juan ha experimentado cambios significativos y ya no es el mismo que en la primera parte de El Eternauta. Está dispuesto a realizar acciones que antes habría considerado impensables con tal de alcanzar sus objetivos.
El Eternauta II muestra sin duda la influencia socio-política de la epoca. Con muchas batallas y enfrentamientos contra sus enemigos la historia y decisiones de los personajes estan mas radicalizadas.
